lunes, 30 de marzo de 2009

En los márgenes de la Matrix

“A veces hay una tendencia a abarcar sólo parte de la vida. Ahora mismo están tratando de abarcar sólo lo que ustedes llamarían el lado positivo. Los invitamos a abarcarlo todo – buenas noticias, malas noticias, las no noticias, las noticias extremas – abárquenlo todo. Al hacer eso, primero que todo, se brindan un flujo de energía muy equilibrado. Se permiten no sólo ver ambos lados de la dualidad, sino que se permiten ver las otras energías muy multidimensionales que están entrando en este momento.

Cuando introduces esta energía y la sientes por ti mismo, sin apropiártela y sin culparte por los infortunios del mundo, te das idea y perspectiva tremenda de lo que realmente está pasando. Como también le dijimos recientemente al grupo, las cosas no son para nada lo que parecen ser. Es uno de mis dichos favoritos de Kryon. Las cosas no son para nada lo que parecen ser porque hay algo muy, muy diferente sucediendo de lo que apenas leen en la superficie.

Cuando te permites absorber completamente todos estos sentimientos, entendiendo que no son tuyos, también lees dentro y das golpecitos a todos los diferentes potenciales, todas las diferentes realidades que existen, y todas las diferentes facetas. Esto les proporciona una tremenda inspiración y una manera totalmente nueva de mirar la vida. Antes que un sendero muy lineal basado en la historia y el futuro lineal, ahora ven que es mucho más abarcador y de hecho mucho más divertido.

Cuando exploras los grandes potenciales que existen ahora mismo dentro de toda esta energía y entiendes cómo usarlo para ti mismo o cómo disfrutarlo para ti mismo, esto establece una energía muy arraigada y anclada en el potencial para la humanidad. Este potencial de cambio y evolución y lo que pudiera llamarse iluminación no necesariamente se alimenta dentro de la matriz – la matriz significando la conciencia de masas o el tipo de rejilla o el tipo de campo de energía y capas que están colocadas en su sitio y que tanta gente está en este momento automáticamente tragándose. Los potenciales se sitúan ligeramente fuera de la matriz para aquellos que están deseosos de buscar respuestas en algún sitio aparte de la matriz, aparte de la vieja conciencia.

Los que tarde por la noche están acostados despiertos y dicen: “Tiene que haber una manera mejor. Tiene que haber algo diferente. ¿Cuál es la respuesta?”. De repente, dan golpecitos al potencial o a la probabilidad que ustedes han ayudado a introducir y de hecho a embellecer aquí en la Tierra. Esa es la magnificencia. Ustedes no están tratando de entrometerse en la matriz y no están tratando de imponerles a ellos sus conceptos de creencia, sino que están presentando una variedad de potencial más amplio, más grandioso para aquellos que puedan querer elegirlo”.

Esta es una respuesta de Tobías (en la canalización de Geoffrey Hoppe) acerca de no aislarse de lo que sucede, pero tampoco incorporarlo sin más. Me impactó porque es exactamente lo que hago desde hace tiempo.

Como comenté en el TIP anterior, estamos bombardeados constantemente por toda clase de hechos e interpretaciones originados dentro de la matriz (para usar los términos de Tobías). Cuando le das poder a esos acontecimientos e ideas (a través del miedo, la ansiedad, la desesperación, la depresión, el estrés), en el fondo estás colaborando a que continúen porque le aportas tu energía.

En cambio, cuando los observas sin engancharte, es extraordinario lo que te sucede. Comprendes profundamente el sentido de los cambios y los aceptas como parte del proceso. Además, al tener una perspectiva fresca e integral, te permites imaginar y movilizar nuevas y sencillas aportaciones, que resultan beneficiosas tanto para ti como para los que están en la búsqueda de algo distinto.

Desde que tengo memoria, no estuve de acuerdo con este sistema. Y, en algún momento de mi vida, decidí que crearía uno que me reflejara a mí y a mis deseos. A riesgo de parecer rara o (directamente) loca, fui encontrando mi propio camino, el que fue ayudando a otros a transitar los propios.

Hace mucho, leí que los verdaderos cambios no se dan adentro ni afuera del sistema. Si estás adentro, eres parte del engranaje. Si estás afuera, no tienes participación. En cambio, si estás en los márgenes, tienes todas las posibilidades. Es lo que dice Tobías. Te acompaño a lograrlo.

domingo, 29 de marzo de 2009

Astronomía del interior

Hoy, fui al Centro Cultural Recoleta con una amiga. Me interesaba ver una ¿instalación? de Ernesto Ballesteros llamada “Astronomía del interior”. Fue impactante.

En la más total oscuridad, se veían fotografías impresas de gran tamaño, que parecían el resultado de largas exposiciones a fuentes de luz en movimiento. Así como las galaxias aparecen en el medio de la noche del universo, asombrándonos con sus luces, formas, movimientos y colores, así también en nuestro interior nos podemos topar con formaciones de intensa y profunda belleza.
Lo que más me sorprendió fue la reacción de la gente. Algunos, al darse cuenta de la oscuridad, retrocedían y se iban. Otros, directamente se asustaban y ni siquiera entraban. Otros daban una vuelta y se marchaban.

A mí me estimuló esa sensación extraña de avanzar sin ver nada, sin saber si había paredes o adónde estaban las fotos. Era una mezcla excitante de temor y entusiasmo. Descubrí que había una conexión de una sala a la otra que no se percibía al entrar y adonde había otra fotografía. Mi amiga se quiso ir y nos marchamos.

Pero yo me quedé con la idea de que en un diario había visto otra fotografía más, que no había encontrado, así que volví. Tanteando las paredes con las manos, localicé otra salita en donde estaba la pequeña fotografía. Me quedé de espaldas a ella, rodeada por la oscuridad y me sentí extrañamente envuelta y protegida por ella. Al girar y ver la fotografía, su luz roja me sorprendió con su belleza y, a la vez, me sacó de esa sensación. Fascinante.

Luego, leí en otro diario que, en la inauguración, la gente discutía acerca de cuántas fotografías había. El crítico comentaba que, si uno recorre la muestra sin un espíritu curioso, se perderá algunas… como en la vida.

lunes, 23 de marzo de 2009

Flor solar

Tomé esta foto en el jardín de mi amiga de La Plata. Es una sencilla flor, de la que ni siquiera sé el nombre. Me cautivó cuando la vi y la fotografié. Y me encantó aún más cuando vi el resultado. Algo de simpleza, de potencia, de luz sobre fondos oscuros, de belleza, de dar, de existir pura y profundamente. Supongo que es un espejo en el que me gustaría verme reflejada...

¿Cuál crisis?

En el mundo globalizado que vivimos, estoy segura que esta palabrita es una de las más usadas en tu entorno, refiriéndose tanto a tu ciudad como a tu país y al contexto general, tanto a lo económico como a lo social, tanto a lo personal como a lo comunitario. Es un concepto omnipresente y, lamentablemente, cargado de miedos y fantasías apocalípticas.

Pero, ¿a qué se están refiriendo? ¿Se cayó el cielo o la bolsa de valores? Me parece que la última. Por lo menos por mi casa, el cielo sigue azul o lleno de estrellas, la tierra continúa dando sus frutos y el sol me da la bienvenida cada día. ¿Se está cayendo el sistema o el mundo? Creo que el primero. Este sistema ha manifestado un mundo injusto, desequilibrado y feroz, pero… ¿no será parte del proceso y la oportunidad de recrear otro?

Durante siglos, hemos dejado nuestro poder en manos de instituciones. Ellas (llámese gobierno, iglesia, jueces, gurúes de cualquier tipo, etc.) han pervertido su rol de liderar y coordinar los energías individuales en pos de acumular poder y dinero. Así, cada uno de nosotros es adoctrinado desde que nace con la idea de que no es nadie, que es totalmente dependiente de factores externos para su desarrollo (padres, cultura, dinero, clase social, lugar de residencia, política, creencias, acontecimientos, y muchos etcéteras) y que debe luchar y esforzarse para alcanzar un cierto estatus que lo librará de la infelicidad y el vacío (o, si está fuera de cierto rango, lo hará a través de medios ilícitos o de la caridad de otros, a riesgo de permanecer un paria).

Hemos perdido toda guía interna. Confusos y desorientados, caemos en los encantamientos que nos venden o en los terrores que nos inculcan. Todos tienen sus intereses, claros o encubiertos: las grandes compañías crediticias o productivas, los medios (¿o miedos?) de comunicación, las iglesias, los gobiernos, etc. Incluso en lo alternativo, hay voces apocalípticas y autoritarias.

Un tema en que se ve notoriamente este esquema es en el de la “inseguridad”. Aquí, en Argentina, es de lo único que se habla. Tradicionalmente usado por la derecha para acceder o perpetuarse en el poder (Bush es un ejemplo cercano; los militares en Latinoamérica hasta hace poco), ahora es un enfoque usado por todos. El resultado: miedo extendido, gente encerrada, pedidos de “mano dura” o directamente pena de muerte, más confusión y… “a río revuelto, ganancia de pescadores”.

¿Qué está pasando en realidad? ¿Y de cuál realidad hablamos? Estamos en una ilusión colectiva y es absolutamente maravillosa: le da a cada uno lo que cree. A eso se refiere la Ley de Atracción. Si pienso que el mundo es inseguro, que cualquiera puede ser robado o asesinado, que dependo de la policía (o de artilugios varios) para protegerme, estaré pendiente de los noticieros, de lo que la gente cuenta, de cualquiera que me parezca sospechoso (y lo serán todos), me quedaré en casa… y finalmente seré asaltado… porque estoy vibrando en esa frecuencia. O porque creo inconcientemente que me lo merezco o que soy una ficha en el sorteo de la vida o que soy una víctima o que necesito validación para mi sistema de creencias o… (te invito a poner tu propia excusa).

¿Qué sucede cuando una zona, una ciudad, un país, un mundo están vibrando en el miedo, la carencia, la irresponsabilidad, la búsqueda de placeres inmediatos, la acumulación de todo tipo, la ansiedad por el futuro, el apego a lo material, la adrenalina emocional, el vacío existencial? Lo que estás observando.

¿Es esa la única realidad? No. Yo, por comenzar, vivo en otra. Una en la cual yo creo y creo, porque para crear hay que creer. Hay muchísimos como yo. Y estamos soñando, visualizando, concretando, disfrutando de una realidad llena de significado y profundidad, sencillez y fluidez, armonía y fuerza, alegría y paz, amor y creatividad.

¿Cómo lo logras? Focalizándote en tu interior, reclamando tu poder, clarificando tus metas, abriéndote a las sincronicidades, dejando que tu corazón te guíe, conectándote con la Fuente. ¿Es fácil o es difícil? Es todo. No importa. En el fondo, nada importa más que la divina simplicidad de este instante sagrado, en que comprendes que eres un ser espiritual creando situaciones para experimentar, en este cuerpo increíble, la multiplicidad de la Unidad. ¿Qué estás creando?

jueves, 19 de marzo de 2009

Corazón agradecido

En estos últimos tres días, tuve charlas con pacientes y un amigo que me brindaron una "retrospectiva" de mi profesión/pasión. Tiendo a vivir tan en el presente que olvido el camino por el que llegué hasta aquí. No me importa esto. Lo que sí creo que sería bueno que incorpore es una apreciación por el camino y los resultados. Creo que me tomo por sentada demasiado, que no valoro lo que me es fácil y sencillo (o lo que hice que resultara de esa forma). En realidad, me parece que lo esencial es más bien la gratitud que sienta: por mí, por todo lo que me ha traído hasta aquí, por las personas que han contribuido y a las que yo he tocado, por Dios.

Me acabo de acordar que, hace unos años, cuando estaba atravesando un mal momento interior, yo iba a una iglesia a "charlar". Necesitaba un lugar vacío y lleno, a la vez. Vacío de gente y lleno de espíritus. En ese vacío, primero charlé con mis demonios, después con mis deseos y, finalmente, logré conectarme con mis guías y mi alma. Fue preciosamente sanador. Dejé de hacerlo y tiempo después, un día se me ocurrió entrar a otra iglesia. Sin proponérmelo, espontáneamente, caminé hacia el altar repitiendo desde el corazón "gracias, gracias, gracias, gracias", con los ojos llenos de lágrimas. Era puro reconocimiento.

Cada día, en cada momento, en cada respiración: gracias.

miércoles, 18 de marzo de 2009

¿Te conectas con el trabajo creativo y la abundancia?

A raíz de distintas consultas, he decidido publicar Dossiers: informes acerca de temas actuales que están experimentando cambios notorios y difíciles de transitar. El propósito es reflexionar acerca del proceso de transformación que está ocurriendo, brindando soluciones utilizables y beneficiosas para ponerlas en práctica.

En estos tiempos de cambios económicos mundiales sucediendo a pasos agigantados, me pareció oportuno comenzar con un tema crucial: el trabajo.

Diría que la dicotomía a innovar en esta Nueva Energía que estamos atravesando es: TRABAJO/DINERO versus SERVICIO/ABUNDANCIA.

En efecto, el trabajo es un servicio que estás manifestando. A través de él, puedes recibir dinero, pero el dinero es nada más que una parte de la abundancia que forma parte de tu herencia divina. Entonces, el objetivo del Dossier es ampliar tu mente de forma de abrirte a la abundancia en sus múltiples formas, mientras disfrutas de consagrar tu servicio a los demás.

Te aseguro que, cada vez más, la clave estará en tu interior, en lo que eres y en cómo tu energía atrae de acuerdo a tu vibración. El miedo (en sus múltiples formas) es nada más que una expresión de tu Ego, enganchado a las versiones apocalípticas y al derrumbe de las seguridades puestas en el exterior.

He repetido incesantemente que RECLAMES TU PODER: ya no estará en el afuera, en el Gobierno, en la Iglesia, en el Banco, en las cosas materiales que tengas, en las demás personas. Está en ti. Y deberás ponerlo en práctica para confiar en el proceso de la Vida, que te está llevando a nuevas y magníficas oportunidades de expansión.

CONTENIDO
PRIMER CAPÍTULO
· PARA CONOCERSE: un Test para evaluar tus actitudes con respecto al tema.
· CREATIVIDAD Y OPORTUNIDAD: El trabajo como obligación o como expresión personal, en un mundo en transformación. Cómo encontrar el trabajo que deseas. Qué hacer con la situación actual. Qué es el éxito.

SEGUNDO CAPÍTULO
· DINERO Y ACTITUD: El dinero y cómo conseguirlo sin sacrificios ni condicionamientos. Actitudes y ayudas para trabajar creativamente.
· TU RELACION CON EL DINERO: ¿Cuáles son las trabas con el dinero? ¿Cuáles actitudes observar? ¿Cuáles son los pasos para materializar lo que deseo? ¿Cuáles son los pasos para materializar dinero?

TERCER CAPÍTULO
· El entusiasmo
· 20 POSIBILIDADES PARA RECREAR TU VIDA: Descubre tus recursos y potencialidades.
· Meditación de gratitud
· Ley de Precesión
· Tu conexión con un trabajo creativo

CUARTO CAPÍTULO
· AFIRMANDO TU ABUNDANCIA: Afirmaciones y soluciones prácticas para conectarte con la abundancia y la prosperidad.
· AUTOEVALUACIÓN: preguntas fundamentales para hacerte y decidir.

INVERSIÓN
· Puedes tener este completo y práctico Dossier por $ 100.- o u$ 50.- o € 50.-
· ¡Te acompaño! Tienes una Tutoría gratuita para hacerme las consultas que necesites, a fin de personalizar en tu vida las sugerencias.
· Si sólo deseas el Dossier, lo tienes por $ 50.- o u$ 25.- o € 25.-

FORMAS DE PAGO
· Argentina: Depósito en Banco Santander Río. Tarjetas de crédito. Pago Fácil / Rapipago.
· Exterior: Tarjetas de crédito. Depósito en Banco BBVA en España.

Estoy a tu servicio para las consultas que necesites. Inicia o prosigue tu camino interior hacia el servicio y la abundancia. Cuanto más te involucres en lo esencial, más rápida y sencilla será la transición.

martes, 17 de marzo de 2009

¡Amo Buenos Aires!

El domingo, fui con una amiga al Museo/Colección Fortabat. Además de admirar los cuadros y objetos, me deleité con el hermoso edificio. Después, nos quedamos tomando un cafe (y comiendo cosas ricas) en el bar, afuera. Era unos de esos días preciosos de otoño que me fascinan: el cielo totalmente limpio, una brisa fresca, el sol a pleno. Charlamos de todo un poco, mientras disfrutábamos de la vista siempre renovada de Puerto Madero.

Cada día amo más Buenos Aires. Cuando recién vinimos a vivir a los suburbios (yo tenía 15... qué lejos!!), odiaba todo. Literalmente, era alérgica a la ciudad. Después, cuando empecé a pasar más tiempo en ella, pensé que, si tenía que vivir aquí, tenía que hacer algo para quererla. Y uno quiere lo que conoce. Así que tomé paseos guiados y la miré con otros ojos... y la comencé a amar. Luego, me mudé a ella y nos relacionamos desde las entrañas, con amor y odio entremezclados.

Hoy, la comprendo, la acepto, le perdono sus excesos, le evito sus malas ondas. La amo.

Ligustros en flor

Ya habrás leído de mi admiración por Juan José Saer, un escritor con una conciencia perceptiva increíblemente poética y maravillosa. Leí este fragmento en “Lugar”, un libro de cuentos. Como siempre, no hay nadie mejor que un autor sensible para transmitir una filosofía abstracta en palabras hermosas y experiencias cercanas. Espero que te cautive tanto como a mí.

“Observé largamente mis pies esta noche y me parecieron más misteriosos que el universo entero. Con ellos, hace algunos años, anduve caminando durante dos horas y cincuenta y cuatro minutos por el suelo polvoriento de la luna.

Lo que pasa es que allá arriba las sospechas se vuelven, de una vez por todas, evidencia. Cualquiera sabe que el universo es un fenómeno casual que, aunque desde nuestro punto de vista parezca estable, en lo absoluto no es más que un torbellino incandescente y efímero, de modo que allá arriba no es en ese sentido que la evidencia se presenta. Caminando por la semipenumbra polvorienta y estéril, si algo aprendí no fue sobre la luna sino sobre mí mismo. Supe que si el conocimiento tiene un límite, es porque los hombres, adonde quiera que vayamos, llevamos con nosotros ese límite. Es más: nosotros somos ese límite.

Y, si vamos a Marte o a la luna, las dos o tres cosas más que sabremos sobre Marte o la luna, no cambiarán en nada, pero en nada, la extensión de nuestra ignorancia. No cabe duda de que sabemos un poco más de nosotros mismos cuando, dejando nuestro pueblo natal, vamos a una gran ciudad y después a otro continente, donde los hombres son un poco diferentes de nosotros, por sus rasgos exteriores, su religión, sus costumbres, pero ese poco más que sabemos no modifica para nada la cantidad de nuestro saber, en relación con lo que ignorábamos. De modo que el provecho científico de nuestras expediciones es más bien escaso. Que quede claro: como todas las otras, la conquista del espacio es principalmente obra de comerciantes y guerreros y sus aspectos científicos son puramente logísticos y pragmáticos. Si hubiese hombres en la luna, como los había en África o América, los reduciríamos a la esclavitud o acabaríamos con ellos. Si los hombres fuesen mejores, tal vez hubiese valido la pena ir a la luna.

El fragmento de mundo que hollábamos, Brown y yo, igual que la tierra paciente que nuestra especie había desfigurado con sus pasos, dejaba intacto el infinito. Saber algo sobre la luna: tal era nuestra ilusión, ya que confundíamos experiencia y conocimiento. ¿Para qué ir tan lejos a develar misterios si lo más cercano –yo mismo por ejemplo- es igualmente enigmático? La yema de los dedos y la luna son igualmente misteriosas, pero los cinco sentidos son más inexplicables que la totalidad de la materia ígnea, pétrea o gaseosa, de modo que excavar la luna, sondear el sol o visitar Saturno, como han dado en llamar caprichosamente a esos objetos sin nombre apropiado y sin razón de ser, no resolverá nada.

Tales son mis pensamientos tenues cuando me paseo por las calles, tan polvorientas como las de la luna, pero en las que mis huellas se desvanecen, fugitivas, casi en el mismo momento en que las imprimo, en mi pueblo natal. La vejez y lo que sigue me ha dado cita para uno de estos días en alguna de sus esquinas desiertas. Es inconcebible que la luna exista, casi tanto como que exista yo. Que haya un universo es por cierto misterioso, pero que yo esté caminando esta noche de primavera en la penumbra apacible de los árboles lo es todavía más. Así como ver la esfera azul desde la luna permitía poseer un punto de vista suplementario pero no volvía las cosas más claras, haber estado en la luna no me reveló nada nuevo sobre ella y, a decir verdad, me gusta más verla desde aquí, redonda, brillante y amarilla. Allá arriba, la proximidad no mejoraba mi conocimiento, sino que la volvía todavía más extraña y lejana.

Desde acá sigue siendo un enigma, pero un enigma familiar como el de mis pies, de los que no podría asegurar si existen o no, o como el enigma de que haya plantas por ejemplo, de que haya una planta a la que le dicen ligustro y que, cuando florece, despida ese olor y que, cuando se la huele, es el universo entero lo que se huele, la flor presente del ligustro, las flores ya marchitas desde tiempos inmemoriales y las infinitas por venir, pero también las constelaciones más lejanas, activas o extintas hace millones de años atrás, todo, el instante y la eternidad. Y, sobre todo que, gracias a ese olor, por alguna insondable asociación, mi vida entera se haga presente también, múltiple y colorida, en lo que me han enseñado a llamar mi memoria, ahora en que al pasar junto a un cerco, en la oscuridad tibia, fugaz, lo siento.”

jueves, 12 de marzo de 2009

Reacciones y decisiones

Hoy, volviendo a casa, encuentro al encargado en la vereda limpiando. La puerta estaba abierta y subo directamente. Cuando voy a abrir mi departamento, tomo la llave de la entrada del edificio en lugar de la que corresponde. Estoy “programada”. No usé la de abajo, pero mi mente me hace sacarla porque eso es lo que hace primero. ¿En cuántas cosas hago lo mismo???

Por eso es tan importante estar conciente continuamente: la automaticidad, la reacción, la programación, los mandatos (y “dispositivos” parecidos) toman decisiones por uno. Estos días, les he dicho a unos cuantos pacientes que, si ellos no toman el poder en sus vidas, sus personajes internos seguirán haciéndolo por ellos.

Los llevan de la nariz por donde quieren, tanto en lo emocional y mental como en la existencia misma. Si no proporcionan una guía, una dirección, se hará y se irá hacia donde esos personajes quieren (con las nefastas consecuencias que después no quieren reconocer como propias).

Así como se echan culpas “afuera” (mis padres, mi cónyuge, mi jefe, el gobierno, etc.) también se lo hace “adentro”. Es necesario reconocer los aspectos inarmónicos, ponerles límites, educarlos (o callarlos) y establecer un Yo fuerte y claro, que haga lo que uno desea.

A propósito, ¿adónde dejé las llaves?

martes, 10 de marzo de 2009

Querer y poder

Sumándome a un intercambio entre Concha y Dora acerca de querer y poder, mi idea es que, en el estado actual en el que estamos, puedo lo que quiero poder. En un sentido amplio, si quiero, puedo. Más específicamente, hay momentos en los que mi querer puede encontrar muchos problemas para poder, sea por mandatos, traumas, heridas, limitaciones, etc. Entonces, son tiempos para trabajar en limpiar y clarificar mi querer. Esto facilitará mi poder, el cual, igualmente, no podrá “todo”. En esta encarnación, tengo límites: cierto cuerpo, ciertas predisposiciones y aprendizajes, ciertos obstáculos (no puedo querer ser bailarina en el Colon a los 53, sin haber estudiado danza). Pero, dentro de ellos, puedo todo lo que quiero, una vez que sepa qué quiero de verdad. ¿Se entiende? ¿O tengo que seguir queriendo expresarme mejor para poder hacerlo comprensible? :-)

lunes, 9 de marzo de 2009

Entrego, confío, acepto y agradezco

Un tiempo atrás, trabajé con este “mantra”. ¿Funcionará si lo repites como un loro? No. Es, más bien, un recordatorio del compendio de actitudes que significa y que abren la mente y el corazón a cualquier situación. Analicemos:

ENTREGO:
Muchas personas gastan sus horas en tratar de controlarse y tener el control de los demás y de su entorno. Planes obsesivos, metas cuidadosamente escritas, horarios para todo, técnicas de control mental o parecidas, críticas y culpas propias y ajenas, exigencias y perfeccionismos, etc. ¿Qué hay detrás de esto? Lo contrario, por supuesto: inseguridad, desconfianza, ideales exagerados, falta de autoestima y arraigo personal.

Otros viven como si no hubiera un mañana o como si no tuviesen la fuerza o la convicción de lograr lo que quieren o con resignación y frustración constantes o con dudas y temores acerca de sí mismos. A veces, estas conductas están encubiertas por una falsa subordinación a un poder superior.

Se necesita una labor de conciencia para esclarecer los miedos y heridas sin sanar, así como una guía interna acerca de quiénes somos y qué deseamos crear. Así, limpios y claros, podemos entregarlo a Dios en la confianza de que se concretará.

CONFÍO:
Estamos llenos de dudas acerca de nosotros mismos, de nuestras elecciones, de lo que va a suceder si tomamos cierto camino, de si tenemos lo que se necesita para ponerlo en práctica… vacilamos, nos complicamos y quedamos paralizados.

En realidad, YA somos lo que deseamos ser, YA decidimos, en un nivel superior, y eso desencadena una serie de acciones a la que debemos responder.

La simplicidad y la verdad son características de la Nueva Energía. La complicación y las mentiras de la Vieja. Lo que se te pide es una elección. ¿Cómo lo harás? ¿Responderás a tu Ego o a tu Alma? ¿Fluirás, confiando, o, resistirás, desconfiando? ¿Darás el salto de fe que te lleve hacia el lugar, las situaciones, las personas que corresponden a tu esencia verdadera?

ACEPTO:
Acostumbrados a resistir, a luchar, a querer cambiar las cosas a la fuerza o por voluntad, la aceptación nos suena a resignación, sometimiento, renunciación o conformismo. No es ninguna de estas cosas. Pensamos que, al aceptar, perdemos eficacia, poder, objetivos, fuerza. Por el contrario, generamos un gran dinamismo al reutilizar positivamente la energía que perdemos en luchar y ponernos en contra de nosotros mismo, de los demás y de la Vida.

Aceptar significa no clasificar ni juzgar, permitiendo que la Vida se explique por sí misma, en la fe de que lo que pasa tiene un propósito (el mejor), aunque no lo entendamos en el momento. Es una actitud de apertura, juego y aprendizaje, que va creando confianza interna.

Cuando aceptamos, fluimos con la existencia; abrazamos la oscuridad y sanamos las heridas; encontramos el equilibrio, transmutando las polaridades; comprendemos desde el corazón; abrimos la puerta a las sincronicidades y a la manifestación milagrosa de la Vida.

AGRADEZCO:
Cuando vivimos resentidos, enojados, frustrados, quejosos de quienes somos, de lo que nos sucede, de los demás, (de todo!), creamos un muro de oscuridad a nuestro alrededor, que impide lo que más deseamos, ya que vibramos en tal negatividad que sólo podemos atraer lo semejante. Se cumplen nuestras peores profecías porque ¿qué son los temores y críticas y auto-humillaciones repetidos una y otra vez sino la creación de lo que vendrá?

Agradezcamos todo, constantemente. Es la clave del cambio, porque, al hacerlo, abriremos nuestro corazón y nos alinearemos con el Flujo Divino. ¿Qué no tienes nada porqué sentir gratitud? Comienza por tu respiración, tu cuerpo, tu vista, tu piel, el alimento de hoy, el techo que te cobija, la manta que te da calor, la mano amiga que se te tiende, la caricia siempre pronta, tu inteligencia, tu capacidad de elección y de creación, tus experiencias, tus conocimientos, la luz que te alumbra… ¿debes perderlos para que los aprecies?

ENTREGO, CONFÍO, ACEPTO Y AGRADEZCO
En cada momento, en cada situación, en cada respiración…

No sé si es el mensaje adecuado para el Día de la Mujer

“A pesar del desarrollo económico de las naciones y de la tecnología cada vez más moderna, el drama humano sigue manifestándose en las carencias afectivas que compartimos unos y otros. Los niños que hemos sido hemos sufrido desamparos y necesidades no satisfechas de todo tipo. Los adultos que hoy hemos devenido seguimos cargando con frustraciones, rabias contenidas y necesidades que invisiblemente se han acrecentado en lugar de apaciguarse. Por lo tanto, los niños que hoy estamos procreando y criando llegan al mundo con padres incapaces de prodigarles la permanencia afectiva y la entrega absoluta que ellos requieren, simplemente porque entramos en competencia desde el hambre emocional. Grandes y pequeños estamos carentes, peleándonos por un trozo de mirada, de reconocimiento o de cariño que finalmente nos proteja.

Abordar la realidad de los niños pequeños hoy en día sería más realista si reconocemos quiénes somos sus padres, maestros y adultos en general, supuestamente responsables de su crianza y educación. Si pensamos con sinceridad y nos miramos tal cual somos, quizás logremos comprender porqué a los niños les pasa lo que les pasa, porqué están “tan terribles”, porqué son “demandantes”, porqué “se enferman”, porqué “no prestan atención”, porqué “no respetan a sus mayores” o porqué abandonan la escuela o se drogan o no comen o se escapan o tienen sexo sin protegerse.

Cuando un niño no es alimentado emocionalmente en la infancia, proviniendo de cualquiera de estas familias descriptas con anterioridad o algunas de sus variantes, se va a convertir necesariamente en un joven necesitado, desesperado, ávido, feroz o adicto. Es decir, va a encontrar alguna manera desplazada de intentar obtener lo que no obtuvo durante su infancia. ¿Lo va a lograr? Claro que no. ¿Por qué? Porque no sabe qué es lo que no obtuvo y lo que necesita originalmente. Va a prestar atención sólo a las manifestaciones desplazadas y va a frustrarse una y otra vez. ¿Por qué? Porque no importa con cuánta comida se atosigue, cuánto droga lo calme, cuánta agresión drene o cuántas pastillas lo duerman: nunca va a obtener cuidados maternales.

No sabe lo que necesita, por lo tanto no lo puede pedir, no lo puede incorporar y no se lo puede procurar a sí mismo tampoco. Todo lo que haga va a ser la consecuencia de una gran equivocación. Por eso, nunca va a terminar de estar satisfecho, toda droga va a requerir más dosis. Toda relación dependiente lo va a arrojar a nuevas relaciones cada vez más destructivas. Toda dieta lo va a arrojar a un circuito de restricciones. Todo acceso al alcohol lo va a dejar más prisionero de sus borracheras. Y toda distancia emocional lo va a colocar cada vez más lejos en su propio desierto.

Somos tantos los individuos que provenimos de diversas historias de carencia emocional en la infancia que da vértigo. Sin embargo, no es ése el verdadero problema. A mi juicio, el gran drama es que somos una masa crítica de seres humanos que no lo sabemos y que seguimos procreando hijos creyendo que los amaremos y que eso será suficiente. Resulta que no. Que el amor puede estar presente como idea personal y colectiva. Pero amar concretamente a los hijos todos los días y todas las noches requiere comprender las contradicciones profundas que sentimos cuando nuestros hijos pequeños nos demandan atención, presencia, conexión y amparo.

Hoy, leí este maravilloso fragmento del libro de Laura Gutman “La revolución de las madres”. Siendo el Día Internacional de la Mujer, me pregunté adónde está lo femenino. No como género, sino como energía femenina, presente tanto en las mujeres como en los hombres.

Gutman dice, antes de estos párrafos, “nuestro lado de bióloga marina, de psicóloga o de maestra necesita disolverse para fusionar con el niño pequeño. Pero, apenas sentimos que se disuelve el personaje que nos ampara, entramos en pánico. Entonces, defendemos a rajatabla esos lugares de identidad, ergo, damos prioridad a nuestro lugar en el mundo en detrimento de la fusión con el mundo emocional del niño pequeño. Así es como los niños quedan emocionalmente abandonados”.

Algunos me escribieron conmovidos por el TIP “Sanando el Niño Interno divinamente” pero siempre me cuestiono si realmente lo ponemos en práctica. Es lindo leer, es gratificante, emotivo. Es genial engancharse de afirmaciones, leyes de atracción y controles mentales. Es magnífico tener, ser parte de este mundo consumista (que se está cayendo a pedazos), escudarse detrás de la excusa de las “necesidades económicas” o “el estatus” (no importa el bando social al que se pertenezca) para no ir hacia adentro y hacer frente al vacío, a las heridas, al abandono.

Tu Niño Interno sigue reclamándote. Continúa esperando esa suave, dulce, contenedora energía femenina que lo ampare y le enseñe a crecer alegre y amorosamente. Te lo aseguro: no es tan complicado ni difícil como lo imaginas. Pero, es necesario hacerlo.

No sé si es un mensaje adecuado para el Día de la Mujer. Seas mujer u hombre, joven adulto o anciano, creo que todos necesitamos abrir el corazón y sostenernos en un tierno abrazo que nos una en el calor del amor, que jamás es tonto o inconciente o débil. El verdadero amor es sabio, poderoso, armonioso, incondicional, presente. Y está en ti, porque tú eres Amor.

jueves, 5 de marzo de 2009

Cambios compartidos

“Ningún objeto es constantemente idéntico a sí mismo. Un tomate, por ejemplo, nunca es única y verdaderamente rojo. Si creemos que es rojo y única y verdaderamente rojo, ese prejuicio nos impide percibir sus estados sucesivos y por lo tanto, al cegarnos para lo que las cosas son íntimamente, nos ciega también para entender el sentido de nuestra existencia. El mismo tomate cambia muchísimo al paso de los días desde que aparece en la planta hasta que es arrancado y depositado en un plato, pero no más de lo que cambia en ese plato durante las horas del día o en unos pocos segundos, cada vez que mi mirada se fija en él y me permite tomar conciencia de su presencia. En mi memoria, sigue cambiando a través de infinitas e imprevistas transformaciones. Tanto como en lo exterior, cambia de forma, de color, de estado y, por último, de sentido.”

Estas palabras de Juan José Saer me impactaron mientras las leía hoy porque es lo que me está sucediendo en estos días. Me percibo totalmente cambiante, mientras en la superficie pareciera que estoy igual.

Me estoy replanteando muchas cosas (en estos 40 días antes de mi cumpleaños… ¿tendrá algo que ver?) y paso de un estado al otro, de una idea a otra, de una emoción a otra, a veces en minutos. Y, como dice Saer, al percibirlo, entiendo el sentido de mi existencia en este devenir, tomo conciencia de mi presencia y, al hacerlo, cambia también la de los que me rodean.

Si bien siempre me he dado cuenta de que los pacientes que me “llegan” tienen que ver conmigo, esto se ha hecho más evidente aún en los últimos tiempos. Y me sorprende (lo charlaba hoy con una paciente nueva) los rápidos cambios que se están sucediendo en ellos. Cuando se dice livianamente “Todos somos Uno”, creo que no terminamos de comprender realmente lo que quiere decir. Lo estoy experimentando bastante estos días…

martes, 3 de marzo de 2009

Sanando el Niño Interior divinamente

Ahora quiero pedirles que dirijan su atención a su parte herida, el niño interior que se ha sentido abatido y humillado a lo largo de muchas vidas en la Tierra. Ustedes han pasado por muchas cosas, tanto en esta vida como en otras pasadas. Es este querido niño dentro de ustedes, físicamente localizado en su abdomen, quien necesita cuidado y atención. Especialmente, él necesita paciencia y confianza por parte de ustedes. Este niño, esta parte emocional suya, no se sana inmediatamente. Él ha sido herido profundamente, y desde esta herida crea emociones negativas en su vida, tales como soledad, miedo, sentimiento de abandono o de rechazo. Estas emociones señalan sus llagas más profundas. Ni siquiera es la muerte lo que ustedes más temen. Es la sensación de total desconexión de Dios lo que constituye la más profunda agonía. Sentirse separado de la presencia amorosa del Espíritu, desconectado de la luz natural y unidad de la Creación, ha creado la carga más pesada dentro de ustedes. Yo les estoy pidiendo que vean ese dolor dentro de ustedes y que extiendan sus manos al niño interior herido.

Sólo imaginen que ustedes son un ángel, un representante de los reinos de la Luz, y sientan cómo su energía de ángel envuelve su cuerpo con un suave y cálido manto. Es una energía dorada que los acaricia y pueden sentir cómo gira alrededor de ustedes, desde la cabeza hasta la punta de los pies. Noten cómo unas manos doradas se extienden hacia su abdomen, hacia el pequeño e inocente niño interior. Díganle al niño que es bienvenido y precioso más allá de las palabras.

Díganle "hola" a ese viejo dolor suyo y permítanle estar ahí. "Tú puedes ser parte de mi vida, no te estoy abandonando". Esta es la compasión que ustedes anhelan, esto es lo que los hace sentirse completos, déjenlo ser. Sostener a su propio ser herido, no dejar que el niño interior sufra todo él solo, es la energía que los convierte a ustedes en el Cristo. En su vida diaria, cada vez que ustedes se resisten a su propio dolor, deseando poder librarse de su miedo e ira de una sola vez, maldiciéndose a ustedes mismos por eso, están abandonando al niño interior. Al resistirse a su dolor, y juzgar el comportamiento que surge de él, apartan al niño de ustedes. Ustedes dicen "yo no quiero más estar triste o enojado o temeroso, yo sólo quiero estar feliz, por qué no puedo superarlo, me odio." Pero el niño interior está llorando y llamándolos, y no va a ser sanado por medio de su resistencia o condena.

Tómense el tiempo para sanarse. Cuando sientan resistencia, deténganse ahí mismo y siéntense. No le den la espalda, liberen la resistencia, por el bien del niño. Quédense con su niño herido, permitan que la energía dorada de su propio ángel lo abrace. ¡No teman ser tan grandes! Tómense todo el tiempo y espacio que necesiten para sanarse. Este proceso de sanación es la verdadera razón por la que eligieron esta vida en la Tierra. La transformación interior que están atravesando es precisamente lo que ustedes se propusieron completar, lo que están llamados a hacer, y lo que la Tierra está esperando. Tengan compasión por su dolor. Enfrenten la desolación profunda interior y díganle a esa parte suya "yo estoy ahí para ti, yo SOY el ángel que trae Luz, yo te llevaré a la tierra prometida. No tengas miedo, porque yo estoy de pie junto a ti, estoy de pie detrás de ti, estoy delante de ti y estoy dentro de ti. Yo no vengo de arriba, no vengo de abajo, vengo de tu alma. Yo soy Tu esencia".

Ustedes se están volviendo ángeles en la carne. Ustedes son ángeles encarnados en la materia física. Tienen mucho para dar y compartir con la gente, pero no dejen que eso los distraiga. Ustedes son lo primero en su vida, y siempre necesitan estar conectados a esa parte de niño interior suya. Tan pronto como ustedes noten que sus emociones se vuelven ingobernables, que se sienten intranquilos, tensos, ansiosos o molestos, denle la cara inmediatamente. Esto es más importante que cualquier otra cosa que ustedes necesiten hacer en su vida. Incluso las otras personas están en segundo lugar. Su vida se trata de ustedes. Ustedes sólo pueden canalizar su luz de ángel dentro de su existencia humana, si también están dispuestos a extenderse hacia su parte más oscura.

Dediquen tiempo y espacio para la auto-sanación. Hagan todo lo que los ayude o los conforte, ya sea asesoramiento espiritual, leer libros, salir a caminar o prepararse una rica comida. Nútranse tanto a nivel espiritual como a nivel humano. Permanezcan enfocados y tómense su tiempo. Así es como ocurre la auto-sanación. Así es como ustedes encarnan su luz de ángel y hacen lo que vinieron a hacer a esta vida. ¡Se trata de ustedes!
Canalización de Jeshua

lunes, 2 de marzo de 2009

Espiritualidad práctica

Ayer, estaba con mi amiga de La Plata caminando por la orilla del río, en una mañana gloriosa después de una noche de lluvia y viento. De pronto, un grupo de unas veinte personas (todas vestidas formalmente) comenzaron a hacer una especie de ceremonia de bautismo en el agua. No sé a qué credo pertenecían.

Comenzamos a charlar sobre el tema y le digo: “estamos todos en el mismo espacio, pero cada uno vive en una realidad diferente, creyendo que la suya es la única”. Y recordé que, a la noche, nos encontramos con una conocida suya en un bar adonde fuimos a escuchar jazz. Esta persona recibía mis Boletines y le había comentado una vez que, para ella, una mujer de círculos intelectuales, eran “muy infantiles”.

Me molestó un poco, pero, entonces, después de mi observación, me di cuenta: “en realidad, a mí no me importa usar términos difíciles ni hacer comentarios crípticos e ingeniosos: lo que de verdad me interesa es que cada uno pueda bajar su filosofía de vida a la cotidianeidad y ver cómo funciona y qué transformaciones necesita hacer para vivir el potencial que trajo, para ser feliz, para iluminar un poco más este momento. Algo así como una filosofía/espiritualidad práctica, concreta, vivible”. En eso estoy…