miércoles, 7 de septiembre de 2011

De soledades y crisis

En la entrada anterior, Mariló escribe: "No me resulta fácil que mi amiga capte este mensaje de confianza, de esperanza, de despertar cuando en su vida cotidiana no consigue encontrar trabajo y su soledad (sin padres y hermanos) le bloquea y le sumerge en una gran incertidumbre cuando se pregunta ¿qué va a ser de mi vida? En ocasiones llego a su corazón y vibramos juntas, pero esta mañana no lo conseguimos llevándose con ella su propia tristeza." 

Insisto en que nuestros desafíos son a nuestra medida (no hay nada que no podamos resolver porque son nuestras creaciones, son de nuestra tamaño) y las hemos diseñado a fin de aprender algo.  Cuando estamos solos, debemos darnos cuenta de que somos capaces de llevar adelante nuestra vida por y para nosotros mismos, que la soledad es una compañera fecunda que nos lleva al interior, al corazón de lo que somos, sin distracciones de ninguna clase, para descubrir el precioso material del cual estamos hechos.  Una vez que nos demos cuenta y lo llevemos a nuestra vida cotidiana, entonces aparecerán los compañeros de viaje que nos enriquecerán el camino, no antes.

No tener trabajo y engancharse de los acontecimientos últimos, de la "crisis", es no confiar en la Providencia, creer que somos pobres entes tirados a las leyes del mercado, sin poder personal ni conexiones con el Universo.  Todo está allí, para ayudarnos a desplegar nuestro don de servicio, sea cual sea.  Es cuestión de comenzar a confiar, en nosotros, en la Vida, en Todo Lo Que Es.

2 comentarios:

Marilo dijo...

Comparto con mi amiga esta entrada y junto a ella disfrutamos de unos minutos de silencio,de diálogo, reflexión,de sentimientos y emociones, de conquistas personales, de esperanza ,de confianza, de ,compromiso con nosotras mismas y con la propia vida, de liberación...al final decidimos ir algún día a Argentina.
Gracias Laura, visitar y "trabajar" con tu blog es unos de los compromisos que adquirimos.
Saluditos desde Asturias.
Mariló

Laura Foletto dijo...

¡Qué bueno, Mariló, que mi comentario haya movilizado todo eso... y una visita a Argentina!! Y gracias por el trabajo: es muy reconfortante. Enormes besos.